02.04.2023
Europa seguirá permitiendo el uso de combustibles sintéticos a partir de 2035

Hoy te traemos un nuevo capítulo en esta divertida serie conocida como “La prohibición del combustible fósil en Europa a partir de 2035”. Sí, sabemos que el título no es muy llamativo, pero estamos seguros de que su desarrollo te interesa tanto como el de tu serie favorita.
Recientemente te contamos que Alemania e Italia habían tratado de oponerse con su veto, de manera ciertamente insistente, a la prohibición del uso de combustibles fósiles para los vehículos dentro de algo más de una década. Pues bien, finalmente la UE lo ha tenido en consideración y ha decidido que los combustibles sintéticos pueden salvarse de la prohibición.
A continuación, te contamos todo sobre esta nueva noticia y, sobre todo, respondemos a la gran pregunta que te estarás haciendo. ¿Qué es el combustible sintético? ¡Vamos allá!
Un acuerdo aceptado a regañadientes
El bloque encabezado por Alemania, que también incluía a naciones como Italia, ha hecho realidad esta perspectiva. Ambas naciones, que primero apoyaron el proyecto de prohibición, cambiaron de opinión al darse cuenta de que pondría fin a los vehículos de combustión interna.
Bruselas pretendía reducir las emisiones nocivas en la UE en al menos un 55% para 2030 respecto a 1990 con la legislación para prohibir los motores de combustión. Ahora intentarán aprobar lo antes posible normas de CO2 para los automóviles. También advierten que el marco legal para integrar los combustibles sintéticos no se creará hasta que los 27 países miembros desbloqueen y ratifiquen el acuerdo básico.
La Unión Europea ha declarado anteriormente que, si se aprueba, obligará a que todos los vehículos con motor de combustión que se vendan a partir de 2035 estén equipados con un sensor que les prohíba arrancar o funcionar cuando se utilice o .
¿A quién beneficia y perjudica esta decisión?
Ha habido ganadores y perdedores en el negocio del automóvil como consecuencia del giro de la Unión Europea. Con esta sentencia de la UE, es la clara ganadora entre todas las marcas. La empresa alemana lleva muchos años dedicada a este combustible. De hecho, gracias a las instalaciones que estableció en Punta Arenas (Chile) a finales del año pasado, fue de las primeras en empezar a desarrollar estos e-combustibles.
Porsche espera vender un 80% de vehículos electrificados en 2030, una categoría que incluye los vehículos propulsados por combustibles sintéticos. La empresa ha invertido 75 millones de dólares en HIF Global, una empresa que crea combustibles sintéticos a partir de hidrógeno, dióxido de carbono y energía eólica. Porsche ha destinado un total de 100 millones a los e-combustibles.
Mazda es otra empresa que se beneficiará de esta elección. En febrero de 2021, el fabricante se unió al programa europeo e-Fuel Alliance como primer fabricante de automóviles. nunca ha apostado todo su futuro a los vehículos eléctricos, a diferencia de otros fabricantes japoneses.
Entre los grandes perdedores, Volvo y Ford se opusieron desde el principio a anular la decisión de la UE. Sostienen que si se adoptan combustibles sintéticos a largo plazo, el planteamiento del cambio climático no cambiará.
Ambas empresas se han comprometido firmemente a vender coches eléctricos. De hecho, y fueron de los primeros fabricantes en declarar que todos los nuevos automóviles que salgan al mercado en 2030 serán totalmente eléctricos. Como otros competidores podrán seguir utilizando sus coches de combustión, todos sus esfuerzos por crear esta tecnología podrían ser en vano.
Otros perdedores notables son los fabricantes de productos exclusivamente eléctricos, como , así como fabricantes chinos como BYD y Rivian. Desde sus inicios, estas empresas sólo han producido modelos 100% eléctricos.
Incluso con los combustibles sintéticos, ampliar la vida útil de los motores de combustión podría perjudicar a las ventas, ya que los consumidores tendrían más tiempo para pasarse a los vehículos eléctricos, si finalmente deciden hacerlo.
En cuanto a otras empresas clave en el sector, es evidente que compañías como Repsol tienen todas las de ganar a largo plazo. A partir del año próximo, contarán con una planta de combustibles sintéticos ubicada en nuestro país.
Por el contrario, empresas de energía como Iberdrola, que ya se frotaban las manos con este futuro acuerdo, ven cómo sus sueños se truncan por el momento. Actualmente, lideran la electrificación del automóvil en España con más de 3.500 puntos de recarga públicos.
Los conductores son, sin duda, los grandes perjudicados
Como estos combustibles son ahora mismo mucho más caros que los de combustión, los usuarios también tendrán mucho que perder. Aunque nadie produce actualmente e-fuel a escala comercial, Stephanie Searle, directora del Programa de Combustibles del ICCT, calcula que hacerlo costaría probablemente unos 7 dólares por litro.
Afirma que el precio es demasiado alto y que no bajará lo suficiente para que este combustible se convierta en una opción asequible. Sin embargo, como su evolución es incierta, se desconoce cuál sería el coste en 2035.
Pero, ¿qué es el combustible sintético?
Como sustituto para seguir quemando gasolina y gasóleo evitando las emisiones de dióxido de carbono que contribuyen al efecto invernadero, la gasolina sintética está empezando a despegar (junto con el gasóleo sintético, que suele denominarse e-Fuel).
La gasolina sintética se crea a partir de cero, a diferencia de la gasolina normal, que se obtiene del petróleo. Una de las materias primas esenciales para el proceso es el dióxido de carbono, disponible de forma natural en la atmósfera.
Si se emplea agua como segunda materia prima y se utiliza energía renovable para alimentar el proceso, el producto final es uno que, al quemarse, libera la misma cantidad de dióxido de carbono y agua que se utilizaron para crearlo.