24.07.2022
Somnolencia al volante: qué es, causas y cómo evitarla

La somnolencia es un efecto muy común en cualquier persona y puede afectarnos cada vez que nos ponemos al volante. La conducción con sueño aumenta significativamente el riesgo de accidentes, lo que provoca un preocupante número de heridas y muertes cada año.
Para reducir el riesgo de estos accidentes, es evidente que una mayor concienciación sobre la conducción con somnolencia puede desempeñar un importante papel. Conocer las causas, las consecuencias y la prevención de la somnolencia te puede permitir evitar riesgos innecesarios en la carretera.
¿Cuáles son los peligros de la somnolencia al volante?
La somnolencia al volante es una de las principales causas de las colisiones de vehículos de motor, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Estos datos probablemente sean una representación demasiado prudente de la realidad, porque a menudo es imposible determinar definitivamente si ha sido esta la causa del accidente, especialmente después de choques fatales.
En vista de ello, otros estudios calculan que la conducción con sueño provoca hasta 6.000 accidentes mortales cada año. Los investigadores estiman que alrededor del 21% de los accidentes de tráfico mortales implican a una persona que conducía con somnolencia.
Conducir bajo estos efectos aumenta considerablemente el riesgo de accidentes de tráfico. Por ejemplo, los micro sueños se producen cuando una persona se adormece durante solo unos segundos.
Cuando se producen mientras se conduce, es fácil que el coche se salga de la carretera o colisione con otro vehículo. Los daños de estas colisiones aumentan cuando se producen a altas velocidades.

Conducir con somnolencia es peligroso incluso si una persona no se queda realmente dormida. Se ha demostrado que la privación del sueño provoca un deterioro mental similar al de la embriaguez y que 24 horas de privación del sueño equivalen aproximadamente a una tasa de alcohol en sangre del 0,10%.
Este deterioro hace que la persona esté menos atenta a su entorno y se distraiga más fácilmente. Ralentiza su tiempo de reacción, lo que hace más difícil evitar los peligros en la carretera. El sueño insuficiente también está relacionado con una peor toma de decisiones, lo que puede llevar a asumir riesgos al volante.
La somnolencia es un efecto muy común en cualquier persona y puede afectarnos cada vez que nos ponemos al volante. La conducción con sueño aumenta significativamente el riesgo de accidentes, lo que provoca un preocupante número de heridas y muertes cada año.
Para reducir el riesgo de estos accidentes, es evidente que una mayor concienciación sobre la conducción con somnolencia puede desempeñar un importante papel. Conocer las causas, las consecuencias y la prevención de la somnolencia te puede permitir evitar riesgos innecesarios en la carretera.
¿Cuáles son los peligros de la somnolencia al volante?
La somnolencia al volante es una de las principales causas de las colisiones de vehículos de motor, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Estos datos probablemente sean una representación demasiado prudente de la realidad, porque a menudo es imposible determinar definitivamente si ha sido esta la causa del accidente, especialmente después de choques fatales.
En vista de ello, otros estudios calculan que la conducción con sueño provoca hasta 6.000 accidentes mortales cada año. Los investigadores estiman que alrededor del 21% de los accidentes de tráfico mortales implican a una persona que conducía con somnolencia.
Conducir bajo estos efectos aumenta considerablemente el riesgo de accidentes de tráfico. Por ejemplo, los micro sueños se producen cuando una persona se adormece durante solo unos segundos.
Cuando se producen mientras se conduce, es fácil que el coche se salga de la carretera o colisione con otro vehículo. Los daños de estas colisiones aumentan cuando se producen a altas velocidades.
Conducir con somnolencia es peligroso incluso si una persona no se queda realmente dormida. Se ha demostrado que la privación del sueño provoca un deterioro mental similar al de la embriaguez y que 24 horas de privación del sueño equivalen aproximadamente a una tasa de alcohol en sangre del 0,10%.
Este deterioro hace que la persona esté menos atenta a su entorno y se distraiga más fácilmente. Ralentiza su tiempo de reacción, lo que hace más difícil evitar los peligros en la carretera. El sueño insuficiente también está relacionado con una peor toma de decisiones, lo que puede llevar a asumir riesgos al volante.
¿Cómo se puede evitar la conducción con somnolencia?
Hay varias medidas que pueden evitar que te quedes dormido al volante. Algunos consejos son beneficiosos justo antes o durante un viaje, y otros sirven para crear hábitos de vida para un sueño saludable.

Antes de conducir
- Planifica el trayecto con antelación para limitar las horas totales de conducción: En la medida de lo posible, divide el viaje en segmentos más pequeños y no dependas de jornadas de conducción extremadamente largas.
- Evita conducir durante las horas de mayor somnolencia del día: El reloj interno de tu cuerpo suele darte más sueño entre la medianoche y las seis de la mañana y a primera hora de la tarde, así que intenta reducir la conducción durante estas horas.
- Reserva tiempo para el descanso: Asegúrate de tener tiempo para hacer varias paradas en el camino para poder recargar las pilas.
- Duerme bien: Es importante descansar lo suficiente la noche anterior al viaje e, idealmente, varias noches antes de conducir.
- Evita el alcohol y otros sedantes: Estas sustancias pueden interferir con la calidad del sueño y pueden dejarte somnoliento al día siguiente.
- Lleva un compañero de viaje: La mayor parte de la conducción con somnolencia se produce cuando las personas viajan solas, así que, si es posible, pide que te acompañe alguien que pueda compartir las tareas de conducción y te ayude a mantenerte alerta.

Mientras conduces
- Permanece atento a las señales de advertencia: Si notas cualquier sensación de sueño o síntomas de conducción somnolienta, busca un momento adecuado para parar y descansar. Recuerda que más vale prevenir que curar, así que no intentes seguir conduciendo si estás cansado.
- Utiliza la cafeína: La cafeína es un estimulante que puede hacer que estés más alerta durante unas horas; sin embargo, no es una cura para todo. Cuando el efecto de la cafeína desaparece, es probable que vuelvas a tener sueño, y una mayor cantidad de cafeína puede ser perjudicial para el cuerpo.
- Desconfía de los "trucos" para mantenerse despierto: Algunas personas intentan tocar las ventanas, el aire acondicionado o la radio para mantenerse despiertos, pero esto puede desviar tu atención de la carretera. En lugar de utilizar estos trucos, es mejor parar y dejar que tu cuerpo descanse lo que necesita.
¿Cuáles son los signos de que debe dejar de conducir para descansar?
Si notas alguno de los siguientes signos de somnolencia al volante, debes parar de inmediato para descansar y recuperar energías:
- Bostezos frecuentes
- Sensación de adormecimiento
- Ojos cansados, ojos caídos o aumento del parpadeo
- Desplazamiento hacia otros carriles o golpear las "bandas sonoras" de la carretera
- Incapacidad para recordar los últimos kilómetros
- Pasar por alto una señal de tráfico o una salida
- Seguir a otros coches demasiado de cerca
- Dificultad para mantener la velocidad adecuada
Con toda esta información, ya deberías estar más que prevenido para evitar la somnolencia al volante. Si quieres encontrar los coches más seguros para mantener tu confianza y evitar accidentes en carretera, en Heycar encontrarás tu modelo seminuevo al mejor precio, siempre con nuestra garantía de calidad.